Construcción de principios del siglo XX. Conserva su estructura original. Este modelo constructivo dotado de dos edificios separados por un patio central se repite en la mayoría de las casas forestales del Parque Natural.
Las casas forestales constituyen un patrimonio imprescindible en la historia de nuestras sierras. Albergaban a los guardas forestales y sus familias, y a los ingenieros de montes cuando trabajaban en la zona. Muchas de ellas, como en el caso de El Cantalar, disponían de viveros forestales que empleaban a muchos serranos y serranas y por lo tanto suponían un importante aliciente económico para la zona.